¿Preparado para volver a disfrutar como nunca de uno de los bocados más irresistibles de siempre? ¡Estamos hablando del sándwich! Una palabra casi mágica que es capaz de llevarnos a lugares y tiempos de nuestra infancia, pero también a algunos de los mejores momentos de nuestro día a día. Algo que siempre ha estado ahí y que nos ha sacado de más de un apuro de última hora, acompañado en cualquier rincón del mundo y que, asimismo, ha sido capaz de desatar nuestra creatividad en la cocina.
Bienvenido al mundo del sándwich de la mano de Ahorramas. Una buena manera de empezar este viaje es rindiendo el homenaje que merecen algunos de los más clásicos. Esos indiscutibles que, si hablamos de sándwiches, no pueden faltar. Seguramente, más de uno tendrá ya la respuesta en la cabeza: el mixto. En efecto, el de jamón y queso es una de las creaciones más sencillas pero también más efectivas de la historia de la alimentación. Y tiene la ventaja de que casi cualquier complemento le resulta adecuado: tomate, lechuga, salsas de todo tipo, huevo y un largo etcétera.
Otro de los que más tradición tiene a sus espaldas es el sándwich vegetal. Aquí los ingredientes pueden ser también de lo más amplio. Además de los básicos tomate y lechuga, el vegetal admite zanahoria, pepinillo, pimientos, cebolla o una mezcla como la de la ensaladilla rusa, con mayonesa para realzar su sabor. Es un bocado de lo más apetecible con el que es posible innovar de mil maneras. Aquí te va alguna: pruébalo con un toque de queso como parmesano rallado o griego tipo feta o con las típicas cremas mediterráneas de garbanzos hummus o el babaganush de berenjenas.
Con Ahorramas siempre hay un sándwich por descubrir
Lo bueno es que eso es solo el principio. Ante nosotros se abre un mundo, el del sándwich, prácticamente infinito. Podríamos decir que el mayor límite lo pondrá tu imaginación, pero vamos a ayudarte dándote pistas con algunas ideas que pueden acabar convirtiéndose en grandes favoritos de tu casa. Aquí te va la primera, y es una propuesta de lo más ligera. El pavo será el ingrediente estrella de algunos de tus sándwiches más frescos para primavera o verano. Combínalo con alguna mermelada o aguacate: el resultado te encantará.
Otra irresistible opción de sándwich original y a la vez ligero es el de salmón con una pizca de queso crema. Sencillamente delicioso. Un clásico que puedes variar a tu gusto es el de atún. Añádele cebolla fresca, pepinillos, aceitunas o alcaparras y verás cómo su atractivo se multiplica. Otro que estamos seguros de que se sumará a tu menú habitual es el de champiñones con huevos revueltos. ¿Una idea vegana? Prueba el sándwich de tofu a la parrilla con rúcula o brotes de soja.
Y si quieres que el mundo entero te quepa en un sándwich aquí te van algunos “hits” internacionales. El de pulled pork, por ejemplo. Se trata de tiras de cerdo desmenuzado a las que podrás añadir a tu gusto otros ingredientes como el queso y salsas como la barbacoa. Siéntete también muy estadounidense con el típico cheese steak, una combinación ganadora de carne de ternera y queso fundido. Prepárate un sándwich a la mexicana con una genial mezcla de carne, verduras y guacamole. Y si lo tuyo es algo más cercano, prueba con el sándwich francés por excelencia, el croque monsieur, un sándwich mixto con una espectacular cobertura de salsa bechamel gratinada. ¡Lo más difícil es elegir solo uno!