La tortilla de María, la paella de Javi, el hummus de Laura: por sus platos estrella les conocerás

Si decimos “las croquetas de la abuela” todo el mundo sabe a qué nos estamos refiriendo. A algo tan único que ni siquiera a nuestra abuela le ha hecho falta patentarlo. Simplemente, es un plato imposible de imitar. Lo mismo puede ocurrir con “los macarrones de nuestra madre”, que no sabemos exactamente qué secreto tiene, aparte del cariño con que está hecha, pero lo cierto es que es única. Es verdad que son dos ejemplos de comidas insuperables, pero también lo es el hecho de que estamos rodeados de personas con una especialidad culinaria. Conozcamos a algunas de ellas.

Por ejemplo, la tortilla de María. Todos tenemos cerca a esa María, aunque también puede llamarse de otra manera, que “clava” este plato tan nuestro y que a todo el mundo le gusta. Y es que María aprendió los secretos con las mejores maestras: abuelas, madres y tías que recogen toda la tradición de la cocina con el toque especial de la intuición. Exacto, puede que María no sepa darte la receta de su tortilla con las cantidades exactas, porque la hace “a ojo”. Pero vaya ojo: es imposible resistirse.

Quién sabe si María se ha cruzado alguna vez, buscando las patatas, huevos y aceite de oliva para su tortilla, con Javi en Ahorramas. Javi es ese experto en la paella del domingo que no necesita ningún pinche de cocina. Lo tiene todo dominado. Por supuesto, el arroz idóneo, que encuentra en nuestros supermercados y tienda online. Pero también el caldo y los ingredientes clásicos como el pollo o el conejo, si tiene el día de carne, o las gambas, langostinos y calamares, si prefiere el mar. Judías verdes, tomates, pimentón y azafrán completan el reino de Javi.

El plato que mejor te sale dice mucho de ti: ¿cuál es el tuyo?

Una cosa buena de las fiestas es que en ellas puede haber no solo una, sino varias estrellas. Está el que cuenta las anécdotas más graciosas, la reina de la pista a la hora de bailar y quien prepara el bocado que desaparece en cuestión de segundos. En este último territorio domina Laura y su hummus. Ella asegura que sus ingredientes son los tradicionales: garbanzos, tahini, ajo, limón, aceite de oliva, sal y comino, pero lo cierto es que todo el mundo es capaz de reconocer su mano maestra tras esta crema para untar con absolutamente todo lo que tengamos a mano.

Y si Laura es la estudiante especializada en un plato, también tenemos a Guille, el viajero. De sus aventuras recorriendo el mundo cada vez que puede le ha quedado el gusto por la cocina internacional. Si te invita a su casa a comer o cenar, nunca sabes si hará tacos mexicanos, con toda la sazón que encuentra en su súper de referencia, Ahorramas, pizza según la preparan en Nápoles o un salteado oriental de noodles con verduras y pollo que parece hecho en el mismísimo sudeste asiático.

La repostería no tiene secretos para Silvia. Estar cerca de ella es una suerte, pues ni siquiera hace falta tener algo que celebrar para disfrutar de sus creaciones. Su despensa está llena de harina, levadura, toppings, mermeladas, cremas y siropes de Ahorramas para deleitar al personal con sus bizcochos, tartas de queso, zanahoria o chocolate, galletas, magdalenas, torrijas, brownies, tiramisús, flanes o natillas. La generosidad es su otro don: de su casa sales siempre con una sonrisa y un tupper para endulzarte la vida.

Ven a Ahorramas, hazte con los ingredientes necesarios y perfecciona tu plato estrella, porque puede decir mucho de ti. ¿Cuál es el tuyo?