Huesos de santo y buñuelos para celebrar una festividad clásica

Llega Halloween, una de las fiestas donde tradición y modernidad, buñuelos y fantasmas, se dan la mano. Es pleno otoño y riadas de jóvenes y no tan jóvenes inundan las calles con sus disfraces. Otros prefieren descansar en casa viendo alguna película de miedo. Pero también es cierto que hay muchas personas para quienes esta sigue siendo una fecha señalada en el calendario en la que disfrutar de algunas de nuestras tradiciones más arraigadas. Y, efectivamente, si nos ponemos clásicos, no solo deberíamos hablar de Halloween, sino del Día de Todos los Santos.

La estampa es bien conocida en cada pueblo o ciudad de nuestra geografía. Es pleno otoño, los días se hacen más cortos y el olor de las castañas asadas comienza a brindar su aroma a las calles. Corremos a nuestros hogares dispuestos a pasar un poco de tiempo con los nuestros y, para ello, es indispensable compartir también con ellos los sabores de siempre. Y entre estos están, qué duda cabe, los huesos de santo y los buñuelos.

Ya solo sus olores tan ligeros y agradables son capaces de transportarnos a unos tiempos en los que no teníamos preocupaciones. O, al menos, no tantas como ahora con el ritmo de la vida actual. A la niñez, porque huesos de santo y buñuelos siempre estuvieron allí. Es por eso que nos sentimos tan bien cuando llega esta época del año y podemos disfrutar de estos dulces casi en cada momento del día.


Tus huesos de santo y buñuelos, en Ahorramas

Y es que, en el fondo, la palabra ‘Halloween’ tiene mucho que ver con el tradicional Día de Todos los Santos. No en vano, en inglés sería una contracción de las palabras ‘all hallows evening’, que traducido sería algo así como ‘la víspera de Todos los Santos’. Pero lo bueno de los dulces típicos de Todos los Santos es que no solo se pueden tomar durante la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre.

En efecto, podemos disfrutar de huesos de santo y buñuelos durante días, antes y después. Para ello, solo tienes que acercarte a tu Ahorramas más próximo y hacerte con ellos. Los huesos de santo son una tradición muy nuestra. Su origen nos lleva, de hecho, a remontarnos en el tiempo varios cientos de años. Concretamente, hasta el siglo XVII. Son especialmente típicos de la comunidad de Castilla y León, pero se comen en todo el país. Y en parte del extranjero: una buena prueba de ello es que en la festividad mexicana del Día de Muertos se consumen dulces emparentados con los huesos de santo como el “pan de muerto”.

En España, pocos dulces de una temporada tan concreta se han transmitido de generación en generación como los huesos de santo. Es inconfundible la forma circular y alargada del mazapán o pasta de almendra -esta fecha también coincide con la de la recolección de este fruto seco-, de unos cinco o seis centímetros, rellena de dulce de yema y con azúcar por encima. ¿Quién puede resistirse a ellos?

Y no menos clásicos son los buñuelos. Ya solo esa palabra nos evoca a un sabor casi otoñal. Al parecer,  los antiguos romanos ya comían unas formas redondas de harina, queso y miel que vendrían a ser los antepasados de los actuales buñuelos. En España, los buñuelos, un postre asociado a la buena cocina de los conventos desde la Edad Media, tienen una relación importante con el Día de Todos los Santos: la leyenda dice que por cada uno que nos comemos, ayudamos a sacar un alma del purgatorio. Elaborados en sartén con harina, de viento o rellenos de crema, nata o chocolate, son un alimento que también ha unido la tradición latina y mediterránea con el continente americano, donde asimismo son populares.

Estas delicias de toda la vida marcan la temporada como solo saben hacerlo comidas con una personalidad tan propia. Su carácter especial reside en el hecho de que no son tantos los momentos en que podemos gozar de un aroma y sabor únicos. Por eso permanecen en nuestra memoria durante tanto tiempo, haciendo de cada año una ocasión única en su compañía. Pero ese momento ha llegado y ahora están esperándote en Ahorramas. Están disponibles hasta el 3 de noviembre.